Baltimore venció a Los Ángeles 30-23 gracias a más de 200 yardas terrestres
Los Ravens pelearán hasta el final por la AFC Norte. El dominio de John Harbaugh sobre su hermano Jim se mantiene tras una contundente victoria de los Baltimore Ravens por 30-23 sobre Los Ángeles Chargers. Con este triunfo, el mayor de los Harbaugh consiguió su tercera victoria en la NFL sobre su hermano y mantiene los Ravens (8-4) en la pelea por el título de su división ante los Pittsburgh Steelers (8-3).
Por otro lado, Jim Harbaugh sigue sin encontrar la manera de vencer a su hermano, y tras la derrota, el panorama de los Chargers (7-4) se ha complicado, pues la ventaja sobre los Denver Broncos (7-5), su principal rival por el boleto a los playoffs, se ha reducido a un juego.
Los Chargers pusieron los primeros puntos al marcador apenas en su primera ofensiva con el mariscal Justin Herbert haciendo la jugada personal luego de no observar a ningún jugador libre. Ya para el segundo cuarto extendieron su ventaja 10-0 con un gol de campo de 42 yardas de Cameron Dicker.
Fue entonces cuando los Ravens reaccionaron. Liderados por Derrick Henry, quien acumuló tres acarreos de más de 10 yardas, lograron avanzar hasta la zona roja. Una vez allí, Lamar Jackson ejecutó una jugada de engaño y, con un acarreo por el costado, puso los primeros puntos para Baltimore, dejando el marcador 10-6.
En la siguiente ofensiva, Jackson demostró por qué es dos veces MVP. Con una precisión impecable, lanzó un pase de 40 yardas a Rashod Bateman, quien, a pesar de la cobertura, aseguró el balón en la zona de anotación. Sin embargo, los Ravens dejaron 24 segundos en el reloj, tiempo suficiente para que los Chargers se acercaran con otro gol de campo sobre el final de la primera mitad, dejando el marcador 14-13 a favor de Baltimore.
Tras el descanso, ambos equipos intercambiaron goles de campo en sus primeras series ofensivas. Para el cuarto cuarto, Baltimore tomó el control gracias a la potencia de Derrick Henry en el ataque terrestre y a un segundo pase de anotación de Lamar Jackson, esta vez dirigido a Mark Andrews.
El equipo de LA regresó a la ofensiva, pero solo duró tres jugadas, mientras que los dirigidos por el mayor de los Harbaugh extendieron su ventaja tras una gran escapada de 51 yardas de Justice Hill. Los locales consiguieron otra anotación para maquillar el resultado, pues se habían quedado sin tiempo en el reloj.