La escasez de alimentos continúa en Alepo, mientras que algunos barrios sufren cortes de electricidad y los precios del combustible siguen siendo elevados. El acceso al agua y a otros servicios clave se ha visto obstaculizado para cientos de miles de personas.
También se reporta que la entrega de ayuda humanitaria a algunas ciudades del noreste de Siria se ha visto obstaculizada por la restricción de movimientos debido a los puestos de control. Al mismo tiempo, se siguen registrando saqueos.