Estados Unidos manifestó el miércoles preocupación por el impacto que podría tener en las operaciones de combate a las organizaciones criminales y la seguridad del personal el hackeo de una gran cantidad de archivos de la Secretaría de la Defensa de México.
A pocas horas de que se inicie en Washington la segunda reunión del Diálogo de Alto Nivel en Seguridad (DANS) entre Estados Unidos y México, el Subsecretario interino de la oficina de asuntos del Hemisferio Occidental, Ricardo Zúñiga, admitió en una conferencia de prensa telefónica que entre las autoridades estadounidenses hay preocupación sobre el impacto que podría generar en las operaciones contra el crimen organizado la filtración de un gran cúmulo de comunicaciones electrónicas del Ejército mexicano.
“La protección de esa información siempre es algo que tenemos que trabajar internamente, tanto como con nuestros socios”, dijo Zúñiga al reconocer que el hackeo es un fenómeno que puede afectar a cualquiera.
El Gobierno mexicano confirmó a finales del mes pasado que un gran cúmulo de archivos de la Sedena fueron extraídos por un grupo de hackers llamado Guacamaya, integrado por elementos anónimos.
El grupo habría robado 10 terabytes de información que incluyen correos electrónicos de las fuerzas armadas de México, El Salvador, Perú, Colombia y Chile, y de la Policía Nacional salvadoreña.
Durante las últimas semanas varios medios locales han difundido algunos de los archivos que fueron sustraídos a la Sedena que incluyen informaciones sobre la salud del Presidente Andrés Manuel López Obrador, actividades de inteligencia y de combate a grupos criminales y la participación de los militares en proyectos del gobierno.
El Secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, encabeza la delegación mexicana que se reunirá el jueves en Washington con el Secretario de Estado, Antony Blinken, el Secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, y el Secretario de Justicia, Merrick Garland, para darle seguimiento a los temas que se abordaron durante el primer encuentro del DANS que se realizó en octubre en la Ciudad de México.
Al hablar de los avances que se han alcanzado en el primer año del acuerdo de cooperación en materia de seguridad, llamado Marco Bicentenario, Zúñiga consideró como un éxito la nueva legislación e inversiones que se aprobaron para modernizar los puertos y aduanas, las acciones que se adoptaron para interrumpir el tráfico de armas, y el desmantelamiento de una docena de redes criminales dedicadas al tráfico ilícito de migrantes.