Representantes de organizaciones de la sociedad civil celebraron la confirmación de la sentencia de 34 años y cinco meses de cárcel contra el sacerdote Aristeo Baca Baca, acusado de violación agravada y abuso sexual agravado contra una niña que fungió como monaguillo en la iglesia Santa María de la Montaña.
Y sin bien el sacerdote permanecerá bajo prisión preventiva domiciliaria, esta sentencia es un poderoso mensaje que envía la Fiscalía Especializada de la Mujer (FEM) de que se puede hacer justicia, consideró Yadira Cortés, portavoz de la Red Mesa de Mujeres.
María Elena Ramos, directora del Grupo Compañeros, dijo que por fin llegó la justicia tan esperada.
El primer fallo condenatorio emitido por un Tribunal de Enjuiciamiento fue emitido el 22 de febrero del 2021, sin embargo, la defensa legal encabezada por el abogado Maclovio Murillo se inconformó ante una Sala Colegiada de Apelación que hoy ratificó la sentencia.