Los franceses tendrán que trabajar más para mantener el nivel actual de las pensiones y de ingresos, según afirmó este miércoles el presidente de Francia, Emmanuel Macron.
En una entrevista con el canal France 2, la periodista preguntó al mandatario qué aconsejaría a los ciudadanos preocupados por la pérdida de poder adquisitivo frente a la alta inflación.
“Si queremos avanzar, no tenemos más remedio que trabajar más duro”, indicó Macron, y prometió mayores beneficios a aquellos que trabajen más, refiriéndose a la exención de impuestos sobre las horas extras.
El presidente abogó también por impulsar una mayor incorporación de la juventud en el mercado laboral.
“Cuando comparo Francia y Alemania, la tasa de participación de nuestros jóvenes en el mercado laboral es menor. Hemos empezado a ganar esta batalla con la reforma del aprendizaje”, sostuvo el jefe de Estado.
Al respecto, señaló que hay que “ir hasta el final”, mencionando las reformas a la escuela secundaria vocacional, al seguro de desempleo y a las pensiones.
Según las estimaciones de expertos citados por Macron, se requiere entre 10.000 y 12.000 millones de euros para financiar las pensiones en 2027. El proyecto propuesto por el presidente supone el aumento gradual de la edad de jubilación de 62 a 65 años para 2031.
Si no se reforma el sistema, sostuvo, hay otras dos formas de financiarlo. Una de ellas es aumentar las aportaciones a la pensión de los trabajadores, “lo que significa que en 2027, de media por trabajador, se tendrá que pagar 400 euros más al año en aportaciones” y esto se traduce en “menos poder adquisitivo”.
“Otra forma de hacerlo […] es bajar las pensiones. Esto es intolerable para nuestros pensionistas”, subrayó Macron.
Por lo tanto, “solo hay una manera de hacerlo si tenemos lucidez: a medida que vivimos más tiempo, es trabajar más tiempo”, concluyó.