Autoridades de Indonesia detuvieron el concierto de la banda surcoreana de K-pop NCT 127 una hora antes de que este finalizara, luego de que al menos 30 personas se desmayaran cuando los asistentes comenzaron a empujarse y aplastarse, informan medios locales.
De acuerdo a los reportes, la multitud comenzó a empujarse cuando los artistas empezaron a arrojar pelotas como recuerdos del evento, por lo que los fanáticos, al intentar conseguirlas, terminaron aplastándose los unos a los otros mientras avanzaban hacia el escenario.
Según señaló la portavoz de la Policía, Endra Zulpan, la decisión se tomó para evitar que las cosas se salieran de control y se produjera un incidente grave, como la estampida ocurrida durante un partido de fútbol el mes pasado en el que murieron más de 125 personas, entre ellas al menos de 40 menores.
Por su parte, Sarly Sollu, jefe de la Policía de Tangerang, localidad donde tuvo lugar el concierto, aseguró que tanto los organizadores del evento como las instalaciones cumplieron con todas las normativas. Sin embargo, destacó, que “el fanatismo hacia la banda es tal que [los asistentes] se olvidaron de su propia seguridad”.