La Patrulla Fronteriza de Estados Unidos registró un aumento en el número de migrantes que cruzaron la frontera sur en la zona de El Paso (Texas) en las últimas horas, supuestamente alentados por el bloqueo al Título 42, que permite expulsar a extranjeros por razones sanitarias, informaron medios locales.
La sede de la Patrulla Fronteriza en El Paso confirmó al medio especializado Border Report que un “flujo elevado” de migrantes, principalmente de Venezuela, Nicaragua, Colombia y Cuba, se registró por la frontera desde el miércoles por la tarde.
En la frontera que divide a El Paso (Texas) y Ciudad Juárez (México) se habían asentado en un campamento cerca de 1.000 venezolanos a los que no se les permitió el paso a Estados Unidos luego de que fueran incluidos en el Título 42 el pasado 12 de octubre.
El campamento estaba vacío, según Border Report.
El incremento de los migrantes que cruzan la frontera en la ciudad texana se da dos días después de que el juez federal Emmet Sullivan de una corte del Distrito de Columbia bloqueara el Título 42, que comenzó a aplicarse en 2020 durante la Administración del ahora expresidente Donald Trump (2017-2021) y que se ha mantenido durante el Gobierno del actual mandatario, Joe Biden.
Bajo el Título 42 se han realizado más de dos millones de expulsiones por razones sanitarias en los años fiscales 2022 (1.103.966) y 2021 (1.107.075), según datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP).
Aunque el fallo ordenó el fin de la aplicación de esta norma inmediatamente, el Gobierno de Biden logró este miércoles que el juez Sullivan concediera un periodo de cinco semanas para prepararse antes de la suspensión del Título 42.
“Este periodo de transición es crítico para asegurar que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) pueda continuar su misión de mantener la frontera segura y llevar a cabo las operaciones fronterizas de manera ordenada”, escribió el juez en la orden.
El DHS acotó en un comunicado que durante este periodo de cinco semanas la normativa seguirá en pie y que el Gobierno estadounidense seguirá “expulsando a adultos que vayan solos y a familias que sean arrestadas en la frontera sur”.