El gobierno de Ecuador declaró la emergencia zoosanitaria en el país ante un brote de influenza aviar altamente patógeno y sacrificará unas 180 mil aves para evitar la propagación del virus, informó este miércoles el Ministerio de Agricultura.
El primer caso del brote de influenza aviar H5 fue detectado en una granja avícola en la provincia andina de Cotopaxi, al sur de Quito, por lo que las autoridades levantaron el fin de semana un cerco epidemiológico y activaron una cuarentena interna en las posibles zonas contagiadas.
La enfermedad, comúnmente llamada queja aviar, a menudo es transmitida por aves silvestres que luego pueden transmitir el virus a las aves de corral.
“Durante los siguientes 90 días no se podrá movilizar aves, productos y subproductos de origen aviar como huevos, gallinas, pollos, entre otros, de las granjas afectadas por el brote”, dijo el ministerio en un comunicado.
“Como parte del protocolo de seguridad se sacrificarán a las aves que están en el foco detectado; son aproximadamente 180 mil aves“, añadió.
Las autoridades dijeron que en el foco detectado está el 0,15% de la población avícola del país, que cuenta con unos 263 millones de pollos y 16 millones de aves ponedoras, según datos oficiales.
El ministerio informó que están realizando a cabo monitoreos y controles con unos 850 técnicos en granjas avícolas, a fin de descartar la presencia de influenza en otras provincias.
El sector avícola ecuatoriano tiene 1.810 granjas y genera 1.800 millones de dólares, lo que representa el 23% del Producto Interno Bruto (PIB) agropecuario de la nación sudamericana.
El Ministerio de Agricultura aseguró que la influenza aviar no constituye un riesgo para la salud de la población, por lo que garantizó el consumo de huevos y carne de pollo.