Miles de marroquíes se manifestaron este domingo en Rabat contra la “vida cara y la represión”, según comprobaron periodistas de AFP presentes en una protesta organizada por colectivos de izquierdas en un momento en que crece la indignación en Marruecos.
Esta marcha nacional, que reunió unas 3.000 personas según reporteros presentes en ella, fue una de las más importantes de los últimos meses en este país del norte de África.
La convocó el Frente Social Marroquí (FSM), que agrupa a partidos de izquierdas y organizaciones sindicales.
“El pueblo quiere que bajen los precios. El pueblo quiere hacer caer el despotismo y la corrupción”, gritaron los manifestantes.
“Hemos venido a protestar contra un gobierno que representa el matrimonio entre el dinero y el poder y que apoya un capitalismo monopolista”, declaró el coordinador nacional del FSM, Younès Ferachine.
Con una inflación del 7,1% en octubre, Marruecos registró “unos niveles de pobreza y vulnerabilidad como en 2014”, a causa de la pandemia del covid-19 y la subida de los precios, indicó un informe reciente del Alto Comisionado de Planificación marroquí.
Además de la “vida cara”, los manifestantes denunciaron “cualquier forma de represión” contra la oposición y la libertad de expresión, en un país donde encarcelaron a varios periodistas y militantes opuestos al ejecutivo actual.