La defensa del exgobernador César Duarte pidió al juez Humberto Chávez Allende la no vinculación a proceso de su representado al considerar que no existe la evidencia probatoria necesaria para relacionarlo con los presuntos delitos de peculado y asociación delictuosa, ambos con penalidad agravada.
Asimismo, solicitó al juez, al Tribunal Superior de Justicia y al Poder Ejecutivivo que se deje de prostituir la justicia del Estado de Chihuahua y que se deje de caer en el hábito de pretender aventar la responsabilidad a quienes ocupan cargos superiores.
En este sentido, la representación legal dijo que, según el artículo 3 de la Contitución local, entre las facultades del gobernador no está la del manejo y cuidado de los recursos públicos, obligación que sí recae sobre otro tipo de servidores públicos.
Asimismo, indicó que las personas bajo identidad reservada que testificaron dentro de la carpeta de investigación, sí ocuparon dentro del tiempo en que se realizaron los supuestos desvíos, cargos de responsabilidad en el manejo de recursos.
Por lo tanto, la defensa de Duarte dijo que, en caso de acreditarse los 12 desvíos que enlistó previamente el Ministerio Público, los testigos protegidos estarían incurriendo en una confesión calificado del delito de peculado.
Agregó que tales declaraciones, se habrían dado ya sea por el temor de ser descubiertos en sus ilícitos, o bien por las presiones y/o torturas que ejercieron sobre ellos en la administración anterior, de los cuales son públicas las denuncias interpuestas en contra de Javier Corral y del exfiscal general, César Peniche.