Los restaurantes de comida rápida McDonald’s reabrieron este domingo sus puertas en Moscú bajo nuevo propietarios rusos y un nuevo nombre: Vkusno i Tochka (Delicioso y punto), después de que el gigante estadounidense abandonara el país en el marco del éxodo de los negocios internacionales de Rusia tras la invasión de Ucrania.
El director general de la cadena, Oleg Paroev, anunció este domingo la apertura de 12 restaurantes en Moscú y alrededores.
Otros 50 restaurantes abrirán el lunes, unos 200 a finales de junio y luego abrirán de 50 a 100 restaurantes por semana hasta llegar al millar, si se cumplen los mejores pronósticos.
El nuevo propietario del negocio de McDonald’s en Rusia es Alexander Govor, quien desde 2015 gestiona 25 restaurantes franquiciados en Siberia.
McDonald’s ahora tiene 15 años para recomprar el negocio en términos de mercado, según el Servicio Federal Antimonopolio, que aprobó el acuerdo a principios de junio.
Govor explicó que las hamburgueserías mantendrán el interior de los locales de McDonald’s pero no habrá referencia alguna a su antiguo nombre. Aunque la cadena todavía tiene existencias de Coca-Cola, la compañía planea seleccionar un reemplazo en la licitación.
El empresario no considera recortes de personal a corto plazo. “Se me ha pedido antes que nada que mantenga la plantilla y dar trabajo a la gente, y eso es lo que voy a hacer”, hizo saber en declaraciones recogidas por la agencia TASS.
“Nuestro objetivo es que nuestros clientes no noten la diferencia ni en la calidad ni en el ambiente”, añadió Paroev durante la ceremonia de apertura en la moscovita plaza Pushkin, donde abrió el primer restaurante McDonald’s en 1990, durante la todavía Unión Soviética.