El Banco Central Europeo (BCE) celebrará una reunión excepcional este miércoles, una semana después de anunciar un endurecimiento de la política monetaria para combatir la inflación, acompañada por un aumento de la brecha en los costos de endeudamiento entre los Estados de la zona euro.
“El Consejo de Gobierno celebrará una reunión ad hoc el miércoles para discutir las condiciones actuales del mercado”, dijo una portavoz del BCE a la AFP.
La portavoz no precisó el orden del día de esta reunión sorpresa que debe celebrarse en Fráncfort.
La semana pasada el BCE anunció que en julio iba a comenzar un ciclo de alza de las tasas de interés para combatir la inflación y que a partir de septiembre habrá una nueva serie de subidas de los tipos de interés.
Este importante cambio en la política monetaria va acompañado del riesgo de fragmentación del mercado de deuda soberana de la Eurozona, lo que provocaría que los Estados europeos se endeudaran a niveles muy diferentes, penalizando a los considerados más frágiles.
La reacción en el mercado de bonos fue inmediata y los rendimientos de la deuda italiana empezaron a subir, aumentando el “spread” (diferencial) con el Bund alemán a 10 años, la tasa que sirve de referencia.
Los responsables del BCE ya han insistido en que están dispuestos a intervenir urgentemente si aumenta el riesgo de fragmentación del mercado de deuda soberana, pero muchos observadores lamentaron la falta de una solución concreta por parte de la institución.
“No toleraremos cambios en las condiciones de financiación que vayan más allá de los factores fundamentales” de los países de la Eurozona que harían que sus costos de endeudamiento se disparen, señaló Isabel Schnabel, miembro del directorio del BCE, en un discurso pronunciado el martes por la noche en París.
“No hay duda de que, cuando sea necesario, podemos y vamos a desplegar nuevos instrumentos para garantizar la transmisión de la política monetaria y, por lo tanto, nuestro mandato fundamental que es garantizar la estabilidad de precios”, añadió.