Los azulcremas no encontraron un buen ritmo en este inicio del AP22 y terminó con un punto ante el Bicampeón
Por ahora estás Águilas están sin pies, ni cabeza. América mostró muy poco en el arranque del torneo al empatar sin goles ante Atlas.
No pudieron hacerle daño al Bicampeón, y aunque era un reto complicado por enfrentar al Bicampeón sin refuerzos el punto en la bolsa no sabe mucho por haber jugado en casa.
Fernando Ortiz fue congruente con su trabajo hecho en la Pretemporada y le dio oportunidad de arrancar a dos de los campeones de la Sub 20, Emilio Lara y Román Martínez, quienes cumplieron bien con su actuación, especialmente el defensa central que logró contener la explosividad de Julián Quiñones.
Como cada inicio de torneo el nerviosismo se notaba en ambos equipos y fueron pocas las veces que pudieron inquietar a su rival, inclusive, por largos ratos del juego se bloquearon en mediocampo y la circulación y conexiones fueron contadas.
Y tal y como sucedió el torneo anterior, Guillermo Ochoa terminó siendo la figura al tapar un par de disparos rojinegros que tenían como destino sacudir las redes de su arco, pero el guardameta confirmó que sigue en un nivel excepcional.
Faltó futbol, faltó el gol, sin embargo, la metamorfosis que probó el Tano no fue mala idea, arriesgada por tratarse del Bicampeón, pero los juveniles se plantaron con carácter, y la ilusión de un futuro prometedor fue tangible en lapsos del partido.