El papa Francisco descartó que vaya a dimitir, al menos “no por el momento”.
“Nunca se me pasó por la cabeza. No por el momento, no por el momento. De verdad”, aseguró en entrevista para Reuters.
Sin embargo, el santo padre confesó que tras la renuncia de Benedicto XVI en 2013 se ha planteado abandonar el máximo cargo dentro de la Iglesia católica en caso de que su estado de salud le haga imposible continuar en su ministerio.
Respecto a su salud el papa Francisco abundó que sufrió una pequeña fractura en la rodilla al dar un paso en falso mientras tenía un ligamento inflamado.
“Estoy bien, voy mejorando poco a poco”, indicó al detallar que recibe terapia con láser e imanes para tratar la fractura.
Cuestionado sobre la guerra en Ucrania, el sumo pontífice se mostró entusiasmado sobre un posible viaje a Rusia.
Explicó que meses atrás hubo contacto con el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov, pero que la respuesta fue que no era el momento adecuado.
Pero insinuó que algo pudo haber cambiado para una visita a Moscú.
Los planes del papa Francisco son concretar una visita a Moscú, Rusia, a su regreso de Canadá, y posteriormente viajar a Kiev, Ucrania.
“Pensé que si el presidente ruso me concedía una pequeña ventana para servir a la causa de la paz… Y ahora es posible que, tras mi regreso de Canadá, pueda ir a Ucrania. Lo primero es ir a Rusia para intentar ayudar de alguna manera, pero me gustaría ir a las dos capitales”, sostuvo.