Los japonenes comenzaron a votar la mañana del domingo en las elecciones a la Cámara Alta del Parlamento, que se celebran apenas dos días después del asesinato del ex primer ministro Shinzo Abe durante un mitin en plena campaña.
Se espera que la votación expanda la mayoría legislativa del gobernante Partido Liberal Democrático (PLD), al que pertenecía Abe.
Los comicios se celebran a la sombra del asesinato, pero el Primer Ministro, Fumio Kishida, y otros políticos han insistido en que el impactante suceso no detendría el proceso electoral.
“No debemos permitir nunca que la violencia suprima la expresión durante las elecciones, que son la base de la democracia”, dijo el sábado, cuando hacía campaña a lo largo del país.
Además, Kishida se tomó tiempo para dar el pésame en la residencia de la familia de Abe en Tokio, donde el sábado por la tarde llegó el cuerpo del ex primer ministro desde un hospital del oeste de Japón.
El asesinato, ocurrido el viernes, conmocionó tanto al país como a la comunidad internacional, provocando una oleada de condolencias y condenas incluso de naciones con las que el belicoso Abe tenía a veces relaciones difíciles, como China y Corea del Sur.
El hombre acusado de su asesinato, Tetsuya Yamagami, de 41 años, está detenido y ha declarado a los investigadores que atacó a Abe porque creía que el político estaba vinculado a una organización no identificada.
La prensa local describió la organización como religiosa y dijo que la familia de Yamagami había sufrido problemas financieros como consecuencia de las donaciones de su madre al grupo