La defensa de César Duarte argumentó al juez Humberto Chávez Allende que el exgobernador salió legalmente del país y tiene residencia permanente en Estados Unidos desde el 13 de noviembre del 2016, gozando de licencia de conducir y permiso para laborar.
Lo anterior, en respuesta al argumento del Ministerio Público quien solicitó la prisión preventiva bajo el entendido de que César Duarte huyó de la justicia, con 19 órdenes de aprehensión en contra por parte del fuero local y una del orden federal, además de una ficha roja por la Interpol.
Los abogados explicaron que por medio de un escrito a puño y letra de César Duarte, se hizo del conocimiento al entonces fiscal general César Peniche Espejel, de la necesidad de someterse a una cirugía en el extranjero ante el riesgo de perder la movilidad parcial de su cuerpo como consecuencia del accidente que sufrió en agosto del 2015 cuando abordó un helicóptero del Gobierno del Estado.
Dicha operación que se realizó en la ciudad de Houston, Texas, se explicó que fue un impedimento para atender dos audiencias a las que fue citado en Chihuahua, mismas que el abogado argumentó, actualmente se declaró el no ejercicio de la acción penal.
Asimismo, se dijo que César Duarte en diversas ocasiones notificó de los medios disponibles para su contacto, siendo por conducto de sus abogados y se agregó que pese a que la Fiscalía sabía que el imputado ya no tenía residencia en México, nunca se le notificó de la manera adecuada.
Finalmente, se solicitó que en caso de que el juez determine imponer la medida cautelar más agresiva, siendo esta la de prisión preventiva, se imponga un plazo no mayor a los 2 años, tomando en cuenta el día en que fue detenido en Estados Unidos por la orden de extradición, el 08 de julio del 2020.