El sacerdote jesuita Javier Ávila,mejor conocido como ‘Pato’, externó su dolor y rabia por los hechos donde fueron asesinados los sacerdotes Joaquín Mora y Javier Campos en el poblado de Cerocahui, municipio de Urique.
Identificó al responsable de las muertes como ‘El Chueco‘, de quien detalló, es “cabeza de delincuentes”.
También denunció amenazas sobre la comunidad de Cerocahui en caso de abundar en detalles.
Primeros informes señalan que Javier Campos Morales y Joaquín César Mora Salazar defendieron a un hombre que acababa de ingresar a la iglesia en busca de refugio.
Sujetos armados dispararon contra los sacerdotes y el hombre, a quien perseguían, sin que hasta el momento se conozcan las causas.
Los tres murieron dentro de la iglesia.